No lo consultes con la almohada

Sé que no soy el único que se queda despierto con miles de pensamientos extraños, historias antiguas, amores perdidos, sueños frustrados, futuro incierto, etc.

Esa maldita almohada que no te deja dormir, con el sólo de recostar la cabeza en ella la mente ahí recién empieza a trabajar, ¿por qué no a la tarde? diría yo, ya que ese es el momento que uno realmente la necesita, no funka luego en el trabajo cuando te piden que hagas algo, o cuando metés la pata bien grande con la/el novia/o, sí o sí decís cosas indebidas; como dije alguna vez “creo que ya hablamos mucho hoy, mejor hablamos mañana, si?”

En esos momentos diurnos parece ser que la mente se quedó en off, totalmente apagada sin reacción alguna, por ende uno comete varios errores como hacer un mal trabajo, pelearse con la novia, putear, y también se unen ocasiones desafortunadas por tu estado de ánimo; el colectivo lleno contigo dentro se descompone, si tenés auto se te pincha la rueda, si vas caminando se te cae la billetera, si andás en bici se te suelta la cadena, no se puede verdad?

Llega el momento nocturno después de un largo día en que nada salió bien, todo fue una mierda y lo único que se desea es dormir con la patas bien abiertas con la cara hacia el colchón, y ¿qué pasa?... El maldito botón que se mantuvo siempre en off por alguna razón todavía no descubierta, se prende y todo lo que no pudiste hacer, los momentos en los que no tuviste reacción, parecen tan simples cuando la cabeza se encuentra reposada en sobre la almohada.

La lucidez llega en los momentos más oscuros por así decir, toda la vida, los problemas, las enemistades, los secretos, los amores, todas las cosas parecen tan fáciles de resolver con los ojos cerrados, el único problema es que la mente no te deja dormir, desde el momento en que uno se acuesta hasta llegar a dormir, cómodamente ya pasaron 3 horas sin descanso, y al día siguiente sin dormir, sin descanso y sin ganas vuelve a ocurrir lo mismo.

El único consejo que les dejo es tomarse una siestita durante el día o vivir soñando, que los problemas así, te pasan por la raya más linda del cuerpo.